La vacunación contra la LHRH (hormona liberadora de la hormona luteinizante) permite a los cerdos crecer como machos enteros durante la mayor parte del periodo de crecimiento y finalización, mejorando las ganancias de los porcicultores debido a que los cerdos de engorda se benefician de una mejor conversión alimenticia de manera natural y una mejor composición de la canal de los machos enteros. Esto constituye una oportunidad única de obtener mejores ganancias para los porcicultores, pero con la garantía de deshacerse del olor sexual en la carne.
Beneficios:
Menores costos en la producción de carne
Equipo de vacunación seguro
Una solida reducción en el tamaño de los testículos
Una mejor conversión alimenticia